136. Mantente alejado de este hombre.

Xia Yao miró la mano contra su pecho y dijo fríamente: "Quita tu pata de perro."

Este tipo de chico elegante nunca antes había escuchado un insulto tan vulgar, inmediatamente maldijo y dirigió su puño al rostro de Xia Yao.

Sin pestañear, Xia Yao agarró el brazo levantado del hombre y le dio un fuerte golpe en la axila. El hombre gritó en agonía y fue enviado volando a unos 2 metros de distancia con la patada de salto de Xia Yao.

Luego agarro el cabello de otro hombre, tiro de su pecho y golpeó su rostro con una fuerte patada voladora desde abajo. La sangre brotó de la nariz de su atacante. Xia Yao pasó a la siguiente persona y agarró los dos brazos que intentaban tirar de él por detrás, arrojó el cuerpo del hombre al aire y lo golpeó contra las barandillas al costado del camino, dejándolo inconsciente.

Todavía quedaba uno, esta persona al principio todavía estaba tratando de mover su puño, pero después de ver el resultado de su pelea estaba demasiado asustado para continuar.

"¡Vete de aquí!" Xia Yao gritó.

Yuan Ru se sorprendió y se apresuró a detener a Xia Yao.

"No seas así, son mis amigos."

"Vuelve al auto." Xia Yao dijo en un tono desagradable.

"Iré con ellos."

"¡Te dije que volvieras al auto!" Los ojos de Xia Yao eran feroces como los de un tigre.

El cuero cabelludo de Yuan Ru se entumeció. Nunca pensó que tales palabras "autoritarias" pudieran venir de los labios de Xia Yao. Ahora se dio cuenta de que había subestimado enormemente su poder explosivo.

Pero una persona que puede convertir a su hermano en un perro leal definitivamente no puede ser tan simple.

Yuan Ru caminó hacia el auto de Xia Yao con ira. Xia Yao finalmente les dio a esos hombres una última mirada de advertencia, y regresó al auto, conduciendo a Yuan Mei Mei (hermana) nuevamente en el camino.

En el camino, la cara de Xia Yao estaba malhumorada y la atmósfera en el automóvil era algo deprimida.

Yuan Ru había fantaseado con este escenario innumerables veces. La escena de ella felizmente saliendo con diferentes hombres para enojar a Xia Yao y donde él la robaría agresivamente por celos. Hoy, la escena con la que había soñado finalmente se hizo realidad, pero el hombre a su lado apareció con el estatus de "cuñada". ¡Qué sabor tan agrio!

A mitad de camino, Xia Yao en su voz profunda preguntó...

"¿Dónde están los dos guardaespaldas que tu hermano había asignado para ti?"

"La gente en realidad tiene que irse a casa a comer y dormir." Yuan Ru dijo en un tono disfrazado.

"Dame sus números." Xia Yao dijo.

Yuan Ru se negó a dárselo.

Los ojos de Xia Yao ahora estaban llenos de fuego, "Si no quieres que le cuente a tu hermano sobre esto, entrega rápidamente sus números de teléfono."

Yuan Ru no pudo hacer otra cosa que decirle obedientemente a Xia Yao los números de teléfono de sus guardaespaldas.

Veinte minutos después, Xia Yao llegó a la casa de Yuan Ru con los dos guardaespaldas esperando junto a las escaleras. Xia Yao empujó a Yuan Ru directamente a sus manos y advirtió repetidamente: no la dejen salir ni medio pie de esta casa.

Luego condujo a la compañía para encontrar a Yuan Zong.

En este momento ya estaba oscuro, Yuan Zong y Tian Yan Qi todavía estaban practicando en el campo de tiro.

Disparar en la oscuridad es más desafiante y estimulante, la sombra compuesta de Yuan Zong de pie bajo la luz de la luna sosteniendo el arma irradiaba una sensación majestuosa, Tian Yan Qi no pudo evitar pensar en la poderosa y heroica apariencia de Yuan Zong al hacer el amor en la cama.

Por lo tanto, el desempeño de Tian Yan Qi hoy era muy pobre.

"Tu corazón no está tranquilo", dijo Yuan Zong.

Tian Yan Qi pensó para sí mismo: ¡Mi corazón no puede estar tranquilo contigo aquí!

"¡Sí!" Una respuesta corta y poderosa para ceder su pobre desempeño.

En el camino de regreso, Yuan Zong de repente abrió la boca y dijo: "¡La máquina de ejercicios que le diste 'Xia Yao Zi' fue desmontada por mí otra vez!"

"¿Ah?"

Tian Yan Qi estaba atónito, pero cuando sus ojos se dirigieron hacia el rostro de Yuan Zong, descubrió que los labios del hombre estaban ligeramente curvados con una sonrisa implícita.

Aunque fue solo un momento fugaz, fue suficiente para hacer que el corazón de Tian Yan Qi latiera más rápido. ¿Yuan Zong bromeó conmigo justo ahora?

"Buenas habilidades de reparación." Dijo Yuan Zong.

Fue un gran honor para Tian Yan Qi ser reconocido por Yuan Zong

"Director Yuan, ¿puedo darle otra sugerencia?"

"Habla."

Tian Yan Qi hizo una pausa y habló lentamente: "Creo que la compañía puede organizar algunas actividades adicionales, como un campamento de experiencia de un día para disparar. Puede atraer a personas interesadas en esas categorías para participar con el registro. Seremos responsables de la capacitación, comida y alojamiento. El concurso de tiro se llevará a cabo al día siguiente, puede establecer los premios y cada participante recibirá un certificado al finalizar."

El rostro de Yuan Zong brillaba en la oscuridad y su estado de ánimo era ambiguo.

Tian Yan Qi parece haber sentido la actitud de Yuan Zong, aunque algo decepcionado, pero también era lógico.

Yuan Zong siempre se ha centrado más en el estatus de reputación y ha prestado menos atención a las ganancias. La gran inversión de capital de la compañía se destina principalmente a los diversos equipos de vanguardia y los salarios de los maestros, por lo que el nombre de la compañía es famoso, pero los ingresos son mucho menores que los de la Guardia Especial de la Pantera Negra. Por lo tanto, invertir dinero en la organización de actividades de participación puede ser una tarea difícil de lograr.

Tian Yan Qi respetó la integridad y el carácter de Yuan Zong, pero también se sintió en conflicto por su estricta autodisciplina. Es una pena que la compañía esté en un buen impulso, pero no aprovecha la oportunidad de expandir su negocio en múltiples campos.

"He hablado sin pensar, por favor ignore lo que acabo de decir." Tian Yan Qi agregó.

Sin embargo, para su gran sorpresa, Yuan Zong estaba inesperadamente relajado...

"Puedo pensar en eso."

El hermoso rostro de Tian Yan Qi mostró una gran alegría que no se puede ocultar. Nunca esperó que Yuan Zong pensara en esa idea, especialmente porque esta actividad tiene como objetivo ganar dinero.

"Puedes elaborar un plan. Si el plan está en condiciones, puedes manejarlo todo tu mismo."

Tian Yan Qi se sintió halagado [1].

[1] Abrumado por el favor de un superior (experiencia humilde)

"¿Yo?"

Yuan Zong asintió.

Tian Yan Qi en el instante enderezó su postura, miró a Yuan Zong y lo saludó militarmente.

"¡Garantizo completar la tarea!"

***

Cuando Yuan Zong regresó a su oficina, Xia Yao acababa de entrar y estaba escabulléndose [2] en el armario. Yuan Zong se acercó en silencio y le dio una palmada en el trasero a Xia Yao con su enoeme mano.

[2] Actuando secretamente.

Xia Yao sintió un dolor agudo, así que se volteó y saltó hacia Yuan Zong.

Yuan Zong aprovechó la oportunidad y levantó a Xia Yao, cargándolo en el aire, sonriendo mientras agarraba sus nalgas.

"¿Buscando algo en secreto otra vez?"

"No husmeaba, solo miraba." Xia Yao dijo.

"¿Mirando? ¿Buscas ver cuál de mis atuendos te gusta para que puedas llevarlo a casa?"

Xia Yao envolvió sus brazos alrededor del cuello de Yuan Zong y dijo: "Entre nosotros, no debería haber diferenciación sobre quién es quién."

Yuan Zong fijó sus ojos en Xia Yao por un momento. Sus dedos ásperos se apretaron en los pantalones de cintura baja de Xia Yao, abriéndose camino hasta su pasaje; El aliento de Yuan Zong se volvió espeso y sus ojos brillaron en una capa de lujuria.

Xia Yao rápidamente agarró su mano y dijo: "Déjame mostrarte algo primero."

Empujó a Yuan Zong, saltó de sus caderas y le entregó a Yuan Zong el periódico de su bolsillo.

Yuan Zong simplemente lo miró y dijo: "Ya lo he leído."

"¿Qué sabes de eso?"

"Obviamente fue intencional", dijo Yuan Zong.

Xia Yao preguntó las palabras que habían estado enterradas en su corazón por algún tiempo, "¿Fue un accidente?"

"¿Quieres decir que hice esto?" Yuan Zong sacudió el periódico.

"No, no me refiero a esto... estoy preguntando sobre la explosión del auto en la carretera."

Yuan Zong admitió sin rodeos: "No fue un accidente."

El corazón de Xia Yao parece haber sido aplastado por un objeto pesado, aunque no pidió los detalles de ese día, pero aún puede imaginar el peligro y el riesgo que asumió Yuan Zong.

"¿Por qué de repente me preguntaste sobre esto?" Yuan Zong le preguntó a Xia Yao.

Xia Yao le contó a Yuan Zong sobre su encuentro con Leopardo el día de hoy.

Como resultado, a Yuan Zong no le importaba por qué Leopardo hizo tal cosa ni le importaba la actitud de la Guardia Especial de la Pantera Negra en este asunto, solo estaba enredado con un problema.

"¿Cómo se volvió tan fanático tuyo?"

Xia Yao frunció el ceño, "¡Me pregunto lo mismo!"

Yuan Zong miró con mal humor a Xia Yao y le preguntó: "¿En el pasado asististe a una fiesta de baile y fuiste notado por él?"

"¿Cuándo asistí a esa fiesta de baile?" Xia Yao estaba muy incómodo debido a la actitud de interrogatorio de Yuan Zong. "Incluso antes, no lo he hecho. A menos que mi madre me haya forzado y no pueda negarme, solo entonces socializaré un poco."

"Si nunca has participado en ese tipo de actividad, ¿cómo aprendiste a bailar?" Yuan Zong todavía lo estaba interrogando.

"No aprendí a bailar desde allí."

"Entonces, ¿de dónde lo aprendiste?"

Xia Yao se arremangó, "Oye, Yuan Zong, ¿estás sin preguntas?"

Con respecto a esto, incluso si Yuan Zong fuera mordido hasta la muerte, todavía no dejará de lado este asunto e insistió en que Xia Yao le dé una respuesta.

Xia Yao se estaba cansando, su estado de ánimo cambió a molestia y su cabello frito [3].

[3] Cuando una persona está asustada, enojada o molesta, la raíz del cabello de esa persona se eriza.

"Yuan Zong, tú... ¡solo espera!"

Xia Yao irrumpió en la habitación. Como no puede ganar contra Yuan Zong en una pelea, y maldecir no servirá de nada, solo hay una forma de manejarlo. Eso es remover todas las mantas, almohadas y sábanas que están bellamente dobladas como un "bloque de tofu" y convertirlo en un desastre caótico, como una "barra de pan" o un "melón podrido."

Yuan Zong tiene un trastorno obsesivo compulsivo incurable; solo una leve arruga en la sábana lo matará.

Xia Yao sacudió directamente la colcha.

Yuan Zong, con sus ojos amenazantes, caminó hacia Xia Yao, "¡Te atreves a hacerlo una vez más por mí!"

Xia Yao tiró de la colcha de Yuan Zong nuevamente y pisoteó varias veces con el pie.

En segundo lugar, todo su cuerpo fue volcado sobre la cama junto con la colcha desordenada con Yuan Zong encima de ellos.

"Ah... No pellizques la carne... Ouch... Me equivoqué..."

***

Por la noche, los dos hombres se empaparon juntos en su bañera recientemente personalizada. Velas de cera encendidas con fragancia de hierba cálida, sirviendo dos deliciosas copas de vino Chateau Lafite Rothschild de 82 años, quitando capas de integridad y revelando humildemente su verdadera identidad. Dos hombres abrazándose en la bañera, sin tener en cuenta la hipocresía, y disfrutando de su felicidad matrimonial con un poco de depravación.

Xia Yao le dijo a Yuan Zong lo que Leopardo le había dicho hoy, sobre la razón por la que estaba soltero, y soltó una risa salvaje, "¿No crees que es estúpido?"

"¡Creo que tú eres el aburrido!" La mano de Yuan Zong estaba frotando la cintura resbaladiza de Xia Yao y persuadiendo en su trasero. "Se divorció una vez. La boca de este tipo no es honesta, su corazón está lleno de malas intenciones, y en el futuro deberías tener menos contacto con él."

"¿Cuántos años tiene él?" Xia Yao tenía curiosidad.

"Treinta y cuatro años." Dijo Yuan Zong.

La lengua de Xia Yao infundida con vino lamió los labios de Yuan Zong y preguntó: "¿Recuerdo que dijiste que la Compañía de la Pantera Negra tiene una historia de veinte o treinta años?"

"Eso es porque él no es el fundador original, Pantera Negra fue cofundada por su tío y otro amigo, y ha tenido varios jefes intermedios; solo se hizo cargo hace menos de cinco años."

Xia Yao resopló: "No es de extrañar que la compañía haya ido cuesta abajo en los últimos años."

Yuan Zong pellizcó la barbilla de Xia Yao y lo advirtió nuevamente.

"De todos modos, mantente alejado de ese hombre."

"Lo sé..." Xia Yao dijo en voz baja y con un sorbo de vino tinto, directamente sumergido en los labios húmedos de Yuan Zong.

La concentración de alcohol aumentó la intensidad de la estimulación, haciendo que Yuan Zong respirara con dificultad. Una mano agarró con impaciencia el cabello de Xia Yao y lo levantó, luego lo presionó violentamente hacia abajo.