144. El rostro molesto de Xiao Yao Zi

En un instante, una sangrienta batalla estalló en la plataforma.

Tian Yan Qi pertenece al tipo atlético delgado con excelente capacidad defensiva, excelente habilidad de ataque, especialmente en combates físicos y cuerpo a cuerpo; Su estilo exuda agilidad. Pero esto no compensó su debilidad en la fuerza. En solo unas pocas rondas, Tian Yan Qi sufrió muchas lesiones. Su cara heroica se convirtió rápidamente en una "cara de panda lamentable." Su frente goteaba sangre, su respiración se volvió más lenta y desordenada, y sus dos ojos escarlata apestaban a hostilidad.

Con un lanzamiento al hombro, Tian Yan Qi cayó pesadamente sobre la plataforma. Su cabeza fue inmovilizada y reprimida por el oponente.

En el último momento cuando la mano del referí estaba a punto de golpear cinco veces, Tian Yan Qi, sin saber de dónde obtuvo el poder divino, de repente se levantó y rugió ferozmente.

Desafortunadamente, el oponente atacó a Tian Yan Qi con un bloqueo de garganta triangular, obligándolo a caer al suelo. Se cayó mientras aún sostenía al oponente más fuerte. Tian Yan Qi no estaba seguro de cuántas veces había escapado de la muerte en esta arena. Durante varias rondas, el público pensó que Tian Yan Qi iba a rendirse, y los aplausos pronto cesaron. Algunos incluso se burlaron de él, y otros lo animaron. Como resultado, la audiencia se sorprendió cuando lo vieron subir de nuevo y continuó con la pelea.

Incluso el referí quería premiar a Tian Yan Qi por su determinación. Nunca ha sido testigo de un espíritu de lucha en el escenario como el de él antes.

La audiencia animó apasionadamente a Tian Yan Qi, algunos no pudieron evitar sudar por él. Casi nadie creía que pudiera ganar. Todos los aplausos fueron por su perseverancia y persistencia.

Solo la cara de Yuan Zong estaba completamente tranquila e inmóvil, jugando tranquilamente con el enrejado dorado.

Tian Yan Qi experimentó otra ronda de fuertes golpes y de repente fue golpeado por el codo de su oponente en la cabeza; la mitad de su oreja estaba rota. Esta escena estaba llena de alarma, incluso el oponente que siempre había peleado con violencia estaba algo sorprendido en este momento.

Justo cuando todos pensaban que Tian Yan Qi iba a ser llevado en una camilla, rápidamente se aprovechó de la cabeza inclinada de su oponente e instantáneamente lo venció en un bloqueo mortal, asfixiando al oponente por la cuenta de cinco segundos.

Todo sucedió tan rápido que el público no tuvo tiempo de reaccionar. Sonó el silbato del referí.

Como resultado, la persona que estaba siendo cargada era el jugador preciado de la Guardia de los Black Panther; su enorme cuerpo ocupaba casi toda la camilla. ¿Quién podría haber pensado que perdería?

Tian Yan Qi ignoró por completo la lesión de su oreja y dejó escapar un fuerte rugido de triunfo que podría tragarse montañas y ríos [1].

[1] Una descripción audaz del impulso.

El auditorio inmediatamente provocó una ola de aplausos. Los instructores y algunos estudiantes de la compañía de Yuan Zong corrieron al escenario. Más de una docena de personas recogieron a Tian Yan Qi y lo arrojaron al aire. Los aplausos y los gritos eran ensordecedores.

Tian Yan Qi estaba tan emocionado que no podía sentir ningún dolor en su oreja medio cortada. Incluso agitó su mano hacia la audiencia para mostrar su orgullosa lesión.

Con los entusiastas aplausos de la multitud, el aspecto moderado de Yuan Zong finalmente se relajó. Varios pasos rápidos subieron al escenario, dejando de lado a algunas personas y atraparon directamente a Tian Yan Qi que estaba cayendo por ser arrojado; Yuan Zong lo sostuvo firmemente en sus brazos, lo felicitó y se rió de todo corazón.

"¡Bien hecho!"

Esta era la primera vez que Yuan Zong reconocía la verdadera capacidad de Tian Yan Qi. Tian Yan Qi estaba más que extasiado que rodeó con sus dos brazos alrededor del cuello de Yuan Zong, tiró de él y lo besó.

Los ojos de Yuan Zong cambiaron de inmediato. Empujó a Tian Yan Qi de sus brazos hacía los instructores.

"Llévenlo a que lo venden."

Una vez que terminaron de vendarlo, Yuan Zong llevó a Tian Yan Qi de regreso a la compañía, que había regresado triunfante con su trofeo. Cuando llegaron a la puerta de la empresa, Yuan Zong vio que Xia Yao acababa de llegar.

Tan pronto como Tian Yan Qi salió del auto, agitó su trofeo a Xia Yao y gritó con gran confianza.

"Oficial Xia, gané el gran premio."

La boca de Xia Yao se abrió instantáneamente y se echó a reír.

"Bueno, estaré condenado, ¿el perro acaba de atrapar una mosca [2]?"

[2] Tener éxito con un golpe de suerte.

Él estaba sinceramente feliz por Yuan Zong.

Sin embargo, al ver a Xia Yao, las expresiones faciales de Yuan Zong cambiaron instantáneamente. Si bien Yuan Zong pudo permanecer completamente tranquilo cuando fue testigo de la sangrienta oreja de Tian Yan Qi a punto de caerse durante la pelea, sus rasgos faciales se distorsionaron rápidamente cuando vio a Xia Yao con un rasguño rojo en el rabillo del ojo.

"¿Por qué tu cara está así?" Yuan Zong preguntó.

"Fui descuidado al implementar algunas tareas", respondió Xia Yao con falta de confianza.

Yuan Zong parecía haber escuchado algunas palabras insoportables, sus ojos se volvieron sombríos como si quisiera colgar vivo al culpable.

"¿Cuáles fueron las tareas que debían llevarse a cabo? ¿Quién lo hizo?

Al escuchar la áspera voz de interrogatorio de Yuan Zong, Xia Yao sintió que era la elección correcta ocultarle la situación.

"Me caí solo..."

De repente, Yuan Zong agarró el brazo herido de Xia Yao y dijo en un tono desgarrado y doloroso: "¿Cuántas veces te he dicho? Presta atención, debes prestar mucha atención, ¿por qué sigues siendo tan desobediente?"

Xia Yao originalmente tenía la intención de cubrir la lesión en su brazo, pero los agudos ojos de Yuan Zong ya lo han detectado. Dio la vuelta a la mano de Xia Yao, enrolló su manga y vio el brazo ensangrentado y magullado, junto con una gran cantidad de carne inflamada, sus ojos casi desangrados.

"Fui demasiado rápido para salir del auto y mi brazo quedó atrapado en el proceso."

El tono indiferente de Xia Yao enfureció aún más a Yuan Zong. Ya no podía controlar su temperamento, y las palabras que no quería decir ya habían estallado.

"¿Estás tratando de enojarme?"

Luego arrastró a Xia Yao al auto, sin dejar que Xia Yao lo desafiara a toda costa y dijo: "Debemos ir al hospital para que te revisen, me gustaría ver cómo te lastimaste tú mismo así."

Por un lado, Xia Yao quería escapar y no dejar que Yuan Zong descubriera la verdad. Por otro lado, estaba extremadamente insatisfecho con la actitud de Yuan Zong, especialmente cuando hay gente a su alrededor, su corazón se enfureció rápidamente.

"¿Por qué me gritas? ¿No está Xiao Tian más herido que yo?"

Debido a su lesión en el oído, toda la cabeza de Tian Yan Qi estaba casi envuelta en una gasa. A primera vista, parecía un poco peor que Xia Yao.

"¿Puedes compararte con él?" La voz enojada de Yuan Zong resonó.

Originalmente, esta oración enfatizaba la importancia de Xia Yao en el corazón de Yuan Zong, pero debido a su fuerte autoestima, Xia Yao malinterpretó el significado subyacente.

"Sí, no puedo compararme con él. Él es más capaz que yo. ¡Soy peor que la basura!" Él vocalizó enérgicamente su ira y caminó directamente hacia el auto. "¡Como solo soy basura, me mantendré lejos de ti y desapareceré de tu vista!"

Tian Yan Qi miró la situación y alejó a varios instructores de la escena.

"Dejen de mirar, vamos primero."

Yuan Zong gritó enojado detrás de Xia Yao, "¡Vuelve aquí!"

Xia Yao caminó en línea recta con sus ojos cerrados hacia la puerta del auto. El corazón de Yuan Zong de repente se suavizó, persiguió apresuradamente a Xia Yao y lo abrazó. Su tono una vez enojado ahora se mezclaba con una profunda angustia...

"¿Todavía no me dirás qué pasó?"

Xia Yao golpeó el estómago de Yuan Zong con su codo, tratando de salir y no estaba dispuesto a ceder.

"¡Piérdete y déjame en paz!"

Yuan Zong apretó su abrazo, frunció el ceño y miró a Xia Yao. Sus ojos estaban llenos de opresión.

"¿Me hiciste enojar tanto pero no puedo decir nada?"

"¡No puedes!" Xia Yao era tan terco como un toro y su boca era tan feroz como sus palabras. "Estoy dispuesto a lastimarme. ¿Qué puedes hacer? ¿Por qué no vas a cuidar a tu amado estudiante?"

A pesar de la atención de los estudiantes a su alrededor, Xia Yao todavía golpeó y pateó a Yuan Zong. Luego, bajo las condiciones de que Yuan Zong todavía estaba enojado, ansioso y renuente, Xia Yao salió de sus brazos, subió directamente al auto, aceleró y salió por la puerta de la compañía.

Antes de ir a ver a Yuan Zong, su brazo herido no tenía mucha sensación. Ahora su corazón estaba molesto y el dolor comenzó a agravarlo. Le temblaba la mano mientras giraba el volante, y apenas podía hacer grandes curvas con el codo.

Xia Yao detuvo el auto a la mitad y encendió un cigarro, sintiéndose deprimido. El humo emitido estaba lleno de quejas.

Sacó su teléfono móvil para navegar por Internet, buscó noticias sobre la "Competencia del Perfecto Guardaespaldas" y encontró la foto de Tian Yan Qi besando a Yuan Zong. En ese momento, aunque fue inesperado, la sonrisa en el rostro de Yuan Zong aún no se había desvanecido, como si aceptara abiertamente el apasionado beso de Tian Yan Qi.

El sabor amargo en el corazón de Xia Ya no se puede describir con palabras.

El día en que recibió la inexplicable llamada telefónica de Tian Yan Qi, en su corazón solo había una pequeña duda. Ahora, viendo la imagen y recordando la llamada telefónica, cada parte del resentimiento de Xia Yao junto con el nuevo odio que se había acumulado encima del viejo se acumuló en explosivo y detonó.

¡Bien! Yuan Zong, ¡realmente lo has logrado! ¡Hemos terminado!

Una oración simple como un juramento personal, Xia Yao condujo a casa lleno de ira.

La madre Xia abrió la puerta y se sorprendió al ver a Xia Yao

"¿Por qué has vuelto tan temprano hoy?"

Xia Yao respondió superficialmente, luego llevó su bolso a su habitación. Cerró la puerta desde adentro, sin preocuparse por sus heridas, se volteó hacia la máquina de ejercicios y desató sus frustraciones con la intención de demolerla.

Después de un rato, la Madre Xia llamó a la puerta.

"Hijo, ven a cenar.”

Xia Yao respondió con voz apagada: "No quiero comer."

La madre Xia preguntó con preocupación: "¿Qué pasa? ¿Sin apetito?"

Xia Yao guardó silencio.

En poco tiempo, la Madre Xia llamó a la puerta nuevamente.

"Sal y toma dos pastillas para el estómago, te hará sentir mejor."

Xia Yao aún permaneció en silencio.

"¿Estás de mal humor? Ven aquí y habla con tu madre."

Como antes, Xia Yao no habló.

La madre Xia abrió la puerta de una patada.

"¿No me estás dando ninguna cara? ¡Ven aquí ahora!"

Xia Yao hizo una mueca durante unos minutos, luego, indignado, abrió la puerta y salió.